miércoles, 17 de diciembre de 2014

Sed

Amanecí perdido, sin saber dónde estaba.

Tenía sed y mis manos estaban cansadas. No entendía la razón de tal cansancio, había dejado la guitarra hace días.
¿Y la sed? Quizá se me venía atrasada, la caminata nocturna me deshidrató o ¿era sólo una necesidad puramente humana? Después de todo, esto de vivir a veces nubla la conciencia y, de paso, las ganas.
Las ganas de seguir siendo, de pretender que somos algo, o alguien, o que somos…

No he escrito hace años, se me nota. La sencillez de las palabras demuestra que ando perdido, que esa esencia que creía mía se me escapó con el color que las letras fueron perdiendo por el paso de los años…
No fue un libro, apenas unos cuentos y algunas rimas… Decir que hice poesía, sería como pretender pertenecer al Olimpo, sin siquiera saber dónde se halla.

¿Son los dioses los que definen nuestras búsquedas o acomodamos a los dioses según nuestra conveniencia y nuestras batallas?

Tengo sed, sigo cansado, mis manos no sostienen ni ese vaso que me ofrece ahora el hada. Debe ser un hada, recuerdo que me acosté solo, hace tiempo que no tengo quien me venga a hacer compañía, hace tiempo que no sé lo que es cargar con alma.

Y tengo prisa, ese nudo en la garganta que me espanta. Ese tener que salir corriendo hacia algún punto distante, sin recordar porqué, cómo, a dónde, ni nada…

Me da de beber cómo a un herido en la batalla, refresca mis labios y me quema el alma. Ese aroma no me es perfecto. Algo pasa. Mi mente reescribe ese aroma, pero aún así no le hallo punto de partida en mis ganas. Toma mi cabeza como a soldado caído, necesitado de ayuda, de descanso, de una cama…
Veo bien, no es el desierto, no estoy perdido, es mi casa. Ahí está la “tele”, y mis posesiones, todas regadas, algo roídas por el uso pero mías.

Habia oido de agua fresca, del milagro en la botella que reaviva nuestras ganas de vivir… me acordé de “127 horas” y lo vital que es no desmayarse en la batalla…
Qué coincidencia para rara,  el protagonista tiene una mano aplastada por la roca, en una quebrada en el desierto… yo estoy quebrado, sin saber porqué... con sed y mis manos no responden. Ni las siento casi…

Perdí el conocimiento y vuelvo ahora a reaccionar. Quién sabe cuanto tiempo ha pasado. Así he sido este tiempo, sobreviviendo a mis sueños, o mejor, sin pensar en ellos.

Ella sigue a mi lado, no ha dicho palabra, le pregunto quién es y sonríe. Intenta hablar pero se le callan las palabras. Insisto en mi pregunta y ella me muestra sus manos, mi nombre está escrito en sus manos, reconozco mi nombre, se quién soy…

Silencio profundo. Mi cabeza se aclara. La garganta se me vuelve un nudo nuevamente. Otro vaso de agua…

Siento mis manos, me duelen, me coloco los lentes y las miro… Es mi nombre tatuado con una pluma de esas que usan los caballeros, las que escupen tinta, las que, literalmente, graban.

Soy. Ella es. Mi nombre en sus manos, sosteniendo las mías... me devuelve la conciencia, las ganas, el alma…

jueves, 4 de diciembre de 2014

Pampa y trigo


Cuando vuelva a ser invierno, 


volverás a ser mi abrigo,


Yo seguiré siendo pampa,


Tú volverás a ser trigo.



martes, 23 de septiembre de 2014

con tu espalda por horizonte...

"Amaos por favor, seguid amándoos
vorazmente insatisfechos por los siglos de los siglos de los siglos,"
Es Jorge Enrique Adoum, quien le canta al amor de dos muertos cuerpos ni tan muertos, cuando, miles de años después, los vivos no han sabido de un amor tan cierto, tan grande, tan hasta la eternidad. 
Tan sin tiempo.
Vivimos amando el amor que aman otros y enfriamos nuestras propias camas, almas, pieles...
Olvidamos que, en el amor, hay un juego de espejos que muestran y devuelven el brillo de quien ama o desea amar. Olvidamos que antes del amor ya somos amor y cuando se va, seguimos siendo el amor que nos mantenía viviendo de verdad.
Confundimos amor con necesidad, con miedo, con anti-soledad. Confundimos amor con canciones de pasión y fuego. Confundimos amor con llamaradas de piel, de piel desnuda pero no amada.
Olvidamos que amar es vivir del presente sin jurar mas futuros que el mismo amor vuelto presente a cada instante nuevo. ¿Vivimos?
Si el amor no invita a vivir no es amor, será un atisbo de fuego que queme mucho pero se apague con la misma velocidad.
Si el amor evoca a la muerte, la invita, la llama, la deja pasar, podrás vivir 1000 años pero no sabrás amar.
Amar sin antes, sin después, con tu espalda por horizonte, con tu vientre por mar.
Sobrevivir en ti. Volver a nacer en mi.
"Te hubiera amado diez años antes del diluvio".

martes, 12 de agosto de 2014

Tiembla, ¿quién tiembla?

Si tiembla la tierra y nos desarma los planes. Si la contingencia no sabe de sueños ni de futuros cercanos. Si la vida nos pide respeto y vamos como aves de paso, ¿por qué nos empeñamos en correr sin parar a pensar?

Quizá solo prepara un futuro mejor este planeta poblado en medio de tantas estrellas caídas y super lunas viajeras; quizá se eriza pensando en mañana, quizá se volvió a enamorar de nosotros viviendo y, sin embargo, corremos tan lejos como nos dejan las manos.

Y caes de bruces ante su ímpetu y vértigo, somos gigantes de letras, pero en ella yacemos, tras el punto final.

Tiembla la tierra, enamorada, erizada, preñada de luz.

Tiemblas tú, porque tus planes no son los de ella.

O quizá tiembla de frío... Quizá.


martes, 17 de junio de 2014

Somos...


A veces somos semilla, 
a veces somos tierra, 
a veces somos abono 
y, 
en ciertas ocasiones,
somos sólo sombra 
para el que quiere descansar de su labor.

Pero somos!


viernes, 13 de junio de 2014

De todas las horas que te pienso, 
hay dos al día en que te olvido,

cuando me escribes que me extrañas
sin que yo te lo haya pedido

y cuando en tus brazos me duermo
y mi alma encuentra alivio.

jueves, 5 de junio de 2014

No te arriesgues.


Vale la pena llegar tarde antes que no llegar...




Lo mas importante del tiempo es disfrutarlo con vida. Un mensaje no debe costarnos tanto.


lunes, 2 de junio de 2014

Sin rodeos!!!, me dijo

Y no supo montar.

Se cayeron las riendas

y no quise parar.


Preferimos los miedos, 

a volver a vivir...

Sigue siendo pradera en invierno,

Cuando vuelvo por ahí.





martes, 27 de mayo de 2014

Hemisferios



No sé cual de mis hemisferios es más débil...


Si el izquierdo porque mi corazón te extraña
o el derecho porque con alcohol te olvida.

Ambos pretenden firmeza y salud, 

pero me tienen enfermo!



lunes, 26 de mayo de 2014

Abrazo



Un día me abrazaron, 
de tal forma, 
que ya no quise irme, 
me quede a vivir 

entre tus piernas.






Luz y sed

Y, ¿qué es la sed? 
¿qué la compone? 
¿Por qué el agua no siempre la apaga?

Y, 

¿Qué clase de fuego provoca esa sed insaciable de hallar la verdad y, que, jamás se apaga?


¿Qué clase de luz propaga aquel que no se esconde en la mentira y busca la verdad con insistencia?


¿Acaso la luz apaga la sed de aquel que no conoce de rendirse ante la ignorancia?

Ser luz, ser sed. 


Ser.


sábado, 24 de mayo de 2014




Cómo me pesa este 'te extraño' que no puedo decirte... 


Es indecible el suspiro que me arrebatas, cada vez que recuerdo tu nombre, tus manos, tus ojos... A ti! 


Cómo me quema ese último beso que no nos dimos, que nos negamos por miedo, porque queríamos evitarnos dolor... Por orgullo 


Ya no soy el mismo, siempre cambiamos, con cada hojarasca traviesa que se lleva el otoño de dejar partir a quien, una vez, juramos amor sin final. 


Cómo me pesa este 'te extraño, que no puedo decirte... 


Este nudo en el pecho que se sabe tu nombre y que busca salida y no sabe que, cada vez que se escapa en un grito enojado, deja huella sembrada que un nuevo suspiro recoge y abona y lo repite otra vez... 


Ya no soy el mismo y, sin embargo, te extraño.  


Ya no somos nada y, a pesar de ello, sigues siendo lo primero que traigo a mi mente cuando quiero llorar o cuando la vida me da una sorpresa y la quiero contar! 


Cómo me pesa este 'te extraño' que no puedo decirte... 


Ya ves cómo! 


Ya ves!










Mil idiomas...



         A mi se me cruzan las letras, en un infinito ir y venir de sabores.



        A mi, se me viene a la mente tu nombre escrito en idiomas y dialectos perdidos, todavía no inventados.




    A mi, la palabra me toma por sorpresa, no me es esquiva, y, sin embargo, callo.

No te me traduzcas, que no quiero perderte el sentido. 



viernes, 23 de mayo de 2014

Un verso...



Un verso 

no termina ni comienza

se transfiere, te despierta...

Un verso 

No es de magia ni es de ciencia


Un verso... 

es mil en uno 

es silencio y elocuencia.


lunes, 5 de mayo de 2014

Si pisas despacio no te hundirás 
mi memoria es frágil, arena movediza...

un lago de agua dulce si me sabes leer

martes, 15 de abril de 2014

Leo poco y leo mucho

Nuestra mente es como un país, se divide en zonas y cada una se desarrolla con los recursos que le han tocado en suerte, pero que, sobre todo, sabe explotar con astucia, inteligencia y, especialmente, con esfuerzo y dedicación.

No todos los países de la roca que llamamos Tierra poseen petróleo y, algunos de ellos, no necesitan de ese grasiento oro negro para ser superdesarrollados.

El niño que aprende a decir "mi mamá me mima" y no para de leer hasta la tumba, es como el país que no tiene petróleo y domina medio mundo: es hábil con sus recursos naturales. No le dedicó horas a su flojera televisiva ni necesitó sumergirse en la tecnología de los microchips de un smartphone para amar las letras.


Saboreó la dicha de las letras, las palabras y los universos infinitos que ellas pueden crear. Universos que una vez leídos fueron vividos como propios y que son inexplorados confines a los que nadie mas podrá llegar jamás.

Un niño que no inventa, crea ni imagina es como ese país del tercer mundo que se dedica a consumir lo que los demás escriben. Nunca crecerá.